Cómo está la raza de YouTube como siempre, un gusto saludarles mi nombre es Esteban Benítez Lyncet, ¡Tu Dentista de Confianza!Y desde aquí, desde mi búnker en Querétaro, México, te mando un abrazo.

Tener una bonita sonrisa va mucho más allá raza que tener dientes derechitos. En esta ocasión, te voy a mostrar tres beneficios comprobadísimos por la ciencia por los cuales te conviene sonreír, y por lo tanto, a tu cerebro también.

Quiero empezar esta publicación con una pregunta muy puntual y lo que me respondas va a decir mucho de ti., te lo aseguro. Cuando tú estás en una fiestesilla con, tus amigos, cotorreando y sale alguien que dice: eh, vengan para una foto. Tú eres de una de dos personas.

Una de dos, eres el clásico que está en primera fila sacando sus mejores poses y con una sonrisa de oreja a oreja.

o por el contrario, eres como esta lo opuesto, eres el que le da pena sonreír porque tus dientes no son fotogénicos (por decirles de alguna manera).

Yo como soy dentista, estarán de acuerdo que por muchos años y gracias a Dios, todos los pacientes o muchos de ellos que he podido atender han mostrado muy buenos resultados. O sea, de manera que en muchos de ellos hay un cambio radical de personalidad. De hecho, ahorita me estoy acordando muchísimo de uno de los pacientes, así como que más recuerdo.

Se llama Edgar, que, por cierto, tengo un video de él (para verlo ve a mi canal de YouTube) Por si quieres ver el casi de éxito completo. Yo creo que Edgar raza, era un tipo de lo más tímido que yo he conocido en mi vida.

Literalmente el vato decía doctor, es que yo no sé sonreír, así de verdad. O sea, resulta que Edgar tenía manchas en los dientes por algo que se le llama fluorosis dental.

Y bueno, lo tratamos a la cita siguiente cuando ya no tenía manchas, no sabes, otra persona completamente diferente.

La última vez que lo vi, que fue a consulta, él ya tenía un trabajo estable bien remunerado en un puesto de gobierno y por su trabajo le tocaba hasta dar presentaciones y hablar en público. O sea, nada que ver con el Edgar que yo conocí.

Entonces estarás de acuerdo que tal vez eso pase muy seguido en los consultorios dentales, o no sé, no sé cómo explicarlo, pero a lo que yo voy raza es de que pareciera que nosotros, como dentistas, desbloqueamos algo en el cerebro de nuestros pacientes cuando ya por fin sienten la libertad o la capacidad de sonreír, a mí siempre me ha dado muchísima curiosidad del saber qué es lo que pasa dentro de la cabeza, del cerebro de una persona, de un paciente cuando este tipo de cosas en cambios de la personalidad sucede.

Y fue por eso por lo que justamente estoy haciendo esta publicación que les estoy compartiendo y encontré tres hallazgos que creo que son muy, muy interesantes que la ciencia ha demostrado y que definitivamente podemos implementar. Tengamos o no tengamos los dientes chuecos por el simple hecho de sonreír y los beneficios que dan a nuestra salud.

Número uno:
Sonreír te hace bajar de peso. Qué buena onda. Así es, chicas. Olvídense el gimnasio, olvídense de las fajas, de esas horribles dietas, de ese té de marihuana que te regaló tu comadre para bajar de peso que sabe de la fregada. Olvídate de esas cosas.

Sonreír es la honda, ¿porque te digo esto? porque resulta que Angie Rosales, a quien te invito que veas en una charla TED, se llama el poder de su sonrisa.

Dice que reír durante cinco minutos equivale a 45 minutos de ejercicio aeróbico, échate esa, y si lo combinamos con otro estudio de la universidad de Maryland, afirma que el reír activa o moviliza hasta 400 músculos del cuerpo, multiplícalo por cinco minutos, hasta el aire te falta.

Razón número dos:
Sonreír reduce el estrés, es bien sabido ¿no? O sea que todos ya nos sentimos más relajados. ¿Pero por qué es eso? explícame eso. Bueno, esto se consigue al regular y disminuir la cantidad de cortisol en sangre aumentando por contra la presencia de neuro transmisores tan beneficiosos como endorfinas, serotonina o la oxitocina. Además, se ha podido comprobar que la presión arterial se equilibra propiciando con ello una agradable sensación de bienestar.

¿Ok? y a estas alturas del partido, seguramente habrá muchos hatere por ahí que me estén restregando. El hecho de que, a ver tu Esteban, que sí, ok, tendrás muchas razones paso sonreír, pero a ver, yo que realmente no tengo razones para sonreír, por lo que tú quieras, porque se me murió un familiar, porque me cortó mi novia, porque se me murió mi gato, o se comió la tarea mi perro.

Por lo que tú quieras, hay razones para efectivamente, está triste en algún me momento de nuestra vida. Eso es cierto. Pero a eso, voy precisamente con el punto número 3
Porque resulta que el cerebro no distingue entre una sonrisa real y una sonrisa fingida, lo volveré a mencionar: el cerebro no distingue entre una sonrisa real y una sonrisa fingida.

Eso que quiere decir que cuando tú finges sonreír, aunque no tengas razones para sonreír, está pasando exactamente lo mismo en tu cerebro se están activando todos los mecanismos neurológicos para que se liberen neurotransmisores, dopamina, endorfinas y tu cerebro y tu cuerpo se sientan en mejor estado.

Por lo tanto, de hecho, hay doctores como el doctor Cliff Kuhn, que te recomiendo, mejor conocido como el doctor de la sonrisa. Él anima a los pacientes que tienen depresión a reírse y a sonreír. Y él ha observado que los pacientes que tienen la voluntad de sonreír experimentan una mejora de su estado de ánimo y una reducción de síntomas de manera casi instantánea.

Así que, si no estás contento, estás deprimido; finge sonreír, es más, lo voy a hacer yo. Ahí te va mi sonrisa fingida.

No más de verme me da risa. Es más, si eres muy amargado, toma un espejo ahí de tu casa. Y mírate. Sí, entonces yo lo comprobé.

Bueno, queridos amigos y pacientes de YouTube, hasta aquí el día de hoy. Me quedo con una sonrisa en mi rostro y seguramente también tú tienes una. Muchísimas gracias por permitirme entrar en las pantallas de sus celulares, o el dispositivo que sea.

Puedes ver el video completo en mi canal de YouTube, me encuentras como Tu Dentista de Confianza y sígueme en Instagram, no olvides regalarme un like y compartir el video.

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Esteban Benítez Lyncet.
Tu dentista de confianza.

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